El Historia, Es Actual

El Pasado se ve reflejado con una mirada crítica en nuestro presente.


Las crónicas han sido desarrolladas en nuestro programa radial QSVT en FM Abril, Rosario.

EL PRIMER PERIODICO

El coronel y abogado Francisco Antonio Cabello y Mesa, el 26 de octubre de 1800 había solicitado al virrey Avilés una licencia exclusiva para editar un semanario en Buenos Aires. Pocos días después el gobernante aprobó el pedido. Asi, en 1801, comienza a publicarse en Buenos Aires El Telégrafo Mercantil, Rural, Político, Económico e Historiógrafo del Río de la Plata. El Telégrafo -como se lo llama familiarmente, para resumir su extenso título tan a gusto de la época- pertenece en realidad a la historia del periodismo y es el primer diario editado en suelo argentino.

Esta edición inicial contenía un par de frases en latín y una breve cuarteta en español:
"Al inocente asido a la cadena,
la esperanza consuela y acaricia.
Suena el hierro en los pies, y dale pena;
más canta confiado en la Justicia".
Con un tiraje de 300 ejemplares, el periódico se editó con la colaboración de dos tipógrafos de la Imprenta Real de Niños Expósitos y el apoyo de 146 suscriptores de Buenos Aires y 100 de otros pagos, de los cuales 25 eran de Montevideo.
El Director en su diario incluía algunas estrofas que él elaborada y firmaba con el seudónimo Narciso Fellobio Cantón, hasta que los aires primaverales lo impulsaron a escribir versos con un tono casi intolerable y tras inmediatas críticas el virrey firmó la orden de suspensión de la licencia a partir del 17 de octubre de 1802., no llegó, pues, a los dos años de existencia,

El Telegrafo alcanzó a editar 110 números y 4 suplementos. En sus páginas llegaron a sumar, sin embargo, a colaboradores tan ilustres como publicación en la que se destacaron Juan José Castelli, Manuel Medrano, Domingo de Azcuénaga, el deán Gregorio Funes ,Pedro Cerviño. Juan M. Labardén, Julián de Leiva y Luis José Chorroarín, entre otros escribas de la época.

Quizás fueran las prosas criticas del Director que impulsaron el cierre, o tal vez, la cada vez el más independiente pensamiento americano que se comienza a vislumbrar en sus páginas., pero lo cierto es que varios de los hombres que escribieron en el Telégrafo , formarían parte del primer gobierno patrio,en 1810.

Asi como hace 200 años, un virrey clausuró la licencia del primer periódico de nuestras tierras, hoy, cuando en el proyecto de ley de medios audiovisuales se ve expresamente facilitada lae manipulación de las concesiones por parte de la autoridad dependienmte del Poder Ejecutivo y retirarlas según un criterio discrecionalmente dispuesto por esa misma autoridad, la idea nos resulta alarmante.

Y no se trata ya de defender a los grupos monopólicos de las comunicaciones, aunque justamente la intencionalidad de la réplica gubernamental es nuevamente transformar esto en un juego amigo-enemigo.. Es ésta situación la que nos reafirma más que nunca la irreductible necesidad de garantizar el derecho a la libertad de expresión como forma de atenuar el poder hegemónico que se disputan gobierno o empresas, unos para acallar las ideas y otros para seguir usufructuando ganancias gracias al monopolio que supieron conseguir en la Dictadura… y en la Democracia.

Pero como siempre decimos…esa, esa es otra Historia..
Arturo Illia al asumir el gobierno en 1962, había considerado oportuno estudiar la calidad de los medicamentos. Dos comisiones, una formada por médicos, bioquímicos, y especialistas en farmacología, y otra formada por contadores y economistas, se centraron en el estudio de los medicamentos.

La comisión integrada por especialistas en ciencias de la salud, trabajó sobre una muestra de más de veinte mil medicamentos: descubrió que muchos de ellos, una parte relevante carecía de las drogas e ingredientes que decían contener, o bien no las tenían en las proporciones explicitadas en sus prospectos.
La comisión de contadores pudo constatar que los grandes laboratorios poseían un doble juego de libros de contabilidad que les facilitaba exagerar los costos para maximizar sus ganancias y su precio excedía en un 1000% al costo de producción.
Inmediatamente Illia envió un proyecto de ley de medicamentos al Congreso

“Este es un gobierno dirigista que se inmiscuye en la elaboración de las medicinas, cuando somos nosotros, los expertos internacionales, los que debemos ocuparnos de ello “le dijo a Illia una delegación de los laboratorios que lo visitó en la Casa de Gobierno-.
La respuesta de Illia fue contundente: “cada uno de ustedes tiene seis meses para presentarnos una declaración jurada en donde interpreten y afirmen cuál es la calidad de su medicamento y la composición de su costo de producción. Con esa documentación hablamos, mientras tanto los precios siguen congelados”. Jamás presentaron un papel.

A tenor de estas circunstancias, la ley 16.462 impulsada por el ministro de salud Dr. Arturo Oñativia, congeló el precio de los remedios, definía a éstos como "bienes sociales" y obligaba a los Laboratorios a producirla en la Argentina. La Ley con el apoyo casi unánime de senadores y diputados, fue sancionada el 23 de julio de 1964 y promulgada el 4 de agosto de 1964
La ira de los grandes laboratorios no tardó en hacerse sentir, y al inicial desagrado norteamericano por el tema de la anulación de los contratos petroleros se sumó el enojo de la industria farmaceutica extranjera. La suerte del gobierno radical quedó sellada mucho antes del levantamiento militar del 26 de junio de 1966.
Volviendo a nuestros días, los ex diputados nacionales Aldo Neri y la peronista Silvia Martínez impulsaron entre 2003 y 2005 la sanción de una nueva Ley Nacional de Medicamentos. Los proyectos fueron cajoneados en la Comisión de Salud de Diputados, cuyo actual presidente, el peronista santafesino Juan Sylvestre Begnis, prometió recientemente que se reactivará el debate parlamentario en pos de la sanción de esa norma legal y reconoció que el Congreso argentino “está en mora”.
45 años en mora…es mucho tiempo y las consecuencias estan a la vista: las mafias se entrelazan con el poder político y los burócratas sindicales , y, el precio de los medicamentos es mas caro en la Argentina que en Europa.
Pero como siempre decimos…esa, esa es otra Historia.

Moreno y la Representación de los Hacendados

A mediados del 1809 la firma inglesa Dillon y Thwaites pidió al Virrey Cisneros la libre introducción de sus mercancías. Lo que solicitaban no era nuevo: Inglaterra había condicionado su ayuda a España para pelear contra Napoleón al hecho de que se aceptara el librecambio en la península. La situación era complicada, por un lado la arcas del virreinato languidecian frente al monopolio comercial con España que estaba afectado por la invasión francesa, y por el otro, la presión cada vez mas fuerte en gravámenes que soportaban los agricultores y artesanos . Los hacendados y labradores acudieron al estudio jurídico de Moreno –el más prestigioso de Buenos Aires– para que elaborara su defensa. Moreno preparó el escrito con el tono de un abogado que defiende a su cliente, no como quien elabora un plan de gobierno, pero en la realidad, el exorto, constituye una obra en si misma, donde se bosquejan, a la luz de las ideas de la época, las posibilidades de sostenimiento del erario público en crisis. y contiene algunas definiciones reveladoras de su visión de la política y la administración pública.
Repasemos algunas frases de la Representación, que son muy elocuentes para reflejarlas en nuestros días.

Sobre el estado de necesidad y el poder ilimitado del gobernante nos dice:
A la imperiosa ley de la necesidad ceden todas las leyes, pues no teniendo éstas otro fin que la conservación y bien de los estados, lo consiguen con su inobservancia cuando ocurrencias extraordinarias las hacen inevitable. Esta máxima que ha convertido en ley suprema la salud de los pueblos, arma al magistrado de un poder sin límites para revocar, corregir, suspender, innovar y promover todos aquellos recursos que en un orden común están prohibidos, pero que en la combinación de circunstancias imprevistas se reconocen necesarios para sostener la seguridad de la tierra y bien de sus habitantes.

Respecto a los recursos del estado y la exportaciones nos ilustra:
Decir que el real erario está sin fondos, es decir que los vínculos de la seguridad interior están disueltos, que los peligros exteriores son irresistibles y que el Gobierno, débil por falta de recursos efectivos, no puede oponer a la ruina del pueblo sino esfuerzos impotentes. De un pueblo que no tiene minas, nada más saca el erario que los derechos y contribuciones impuestas sobre las mercaderías; los apreciables frutos de que abunda esta Provincia, y el consumo proporcionado a su población, son los verdaderos manantiales de riquezas que deberían prestar al Gobierno abundantes recursos, pero, por desgracia, la importación de negociaciones de España es hoy día tan rara como en el rigor de la guerra con la Gran Bretaña, y los frutos permanecen tan estancados como entonces por falta de buques que verifiquen su extracción. La inercia de estos dos grandes muelles es el origen de la pobreza del erario: pónganse en movimiento e inmediatamente la continuada circulación de un giro rápido llenará la Aduana de los tesoros que en otros tiempos producía.
Sobre el comercio y los intermediarios exportadores declama la Representacion :
"¿Qué viene a ser el comercio? Es el movimiento o circulación de los objetos de cambio, por el que nos deshacemos de nuestros sobrantes, y adquirimos lo que nos hace falta. ¿Quiénes son los que contribuyen más al comercio, y, por consiguiente, sus partes esenciales? Son los creadores de los objetos de cambio naturales o manufacturados: son los agricultores y artesanos. Vosotros, comerciantes de los puertos de mar, vosotros no sois sino los corredores, los trajineros del comercio; más, en muchos casos sus mayores enemigos, por el precio exorbitante que ponéis a vuestra intervención. ¿Miráis en vuestras operaciones el bien del estado? No; el oro es vuestro dios y el objeto de vuestras diligencias, como lo prueba el que siempre os he visto contentos de la escasez y pesarosos de la abundancia."Decís que protegéis al labrador y al artesano: ¿pero cómo los protegéis? Adelantándoles socorros de poca monta sobre su cosecha o su trabajo, con condiciones tan usurarias, que en lugar de sacarles del ahogo, vuestro socorro les sumerge más y más en la pobreza.

En relación al Interior y la circulación del dinero, propone:
Dada a nuestro comercio la actividad y vida consiguientes a la libertad de importar y extraer, no hay riesgo alguno de que falte el numerario para las atenciones del estado y necesidades del ciudadano: el dinero necesario para la circulación interior de un país nunca se consume, porque está ligado por la misma reciprocidad de los cambios, y el inmediato interés que todos tienen en no desprenderse de la parte precisa para la correspondencia de los negocios, y satisfacción de las urgencias privadas

Y en la propuesta final reafirma el caracter protectivo del intercambio:
Primera: Que la admisión del franco comercio se extienda al determinado tiempo de dos años, reservando su continuación al juicio soberano de la Suprema Junta, con arreglo al resultado del nuevo plan.Segunda: Que las negociaciones inglesas se expendan precisamente por medio de españoles,
Tercera: Que cualquiera persona, por el solo hecho de ser natural del Reino, esté facultada para estas consignaciones, siéndole libre la elección de cualesquiera medios para ejecutar las venta
Cuarta: Que en la introducción de los efectos paguen los derechos en la misma forma y cantidad que para los permisos particulares que se han introducido.Quinta: Que todo introductor esté obligado a exportar la mitad de los valores importados en frutos del país: siendo responsables al cumplimiento de esta obligación los consignatarios españoles a cuyo cargo giran las expediciones.Sexta: Que los frutos del país, plata, y demás que se exportasen paguen los mismos derechos establecidos para las extracciones que practican en buques extranjeros,sin que se extienda en modo alguno esta asignación a la agricultura, a cuyo fomento debe convertirse la principal atención.Séptima: Que los lienzos ordinarios de algodón que en adelante puedan entorpecer o debilitar el expendio de los tucuyos de Cochabamba, y demás fábricas de las provincias interiores que son desconocidos hasta ahora entre las manufacturas inglesas, paguen un veinte por ciento o más de los derechos, para equilibrar de este modo su concurrencia.

A 200 años, justo hoy 30 de Setiembre, se cumplen 200 años del la presentación, y frente a la falta de politica que favorezca el desarrollo agricolo-ganadero y fomente la actividad de pueblos y ciudades de nuestro interior, la Representación de los Hacendados, es una bofetada la cara a nuestra dirigencia politica

Pero como siempre decimos, esa, esa es otra Historia